Liderazgo empático: lección del 2024 en la experiencia del colaborador: Catalina Páez de KPMG

El presente año trae consigo una serie de retos y oportunidades para las organizaciones, especialmente en la gestión del talento. Catalina Páez, directora de Gestión Humana en KPMG Colombia, ofreció en diálogo con Ambito RH una visión clara sobre los aprendizajes clave que las empresas deben incorporar para fortalecer la experiencia de sus colaboradores. Según la experta, en un entorno laboral cada vez más dinámico y digital, las empresas deben centrarse en tres pilares fundamentales: liderazgo empático, diversidad inclusiva y flexibilidad laboral.

Uno de los principales aprendizajes que destaca Páez es la evolución del liderazgo

Hoy, los colaboradores esperan de sus líderes más que solo dirección; buscan comprensión y apoyo. Un liderazgo empático, accesible y dispuesto a escuchar tanto en lo profesional como en lo personal es esencial para generar un ambiente de trabajo saludable y un mayor engagement

La habilidad de un líder para establecer una conexión auténtica y significativa con su equipo se ha convertido en un factor esencial para fomentar la motivación y preservar el bienestar organizacional. Este tipo de liderazgo, basado en la empatía y la cercanía, es fundamental para cultivar un ambiente de trabajo positivo, que favorezca el compromiso y la productividad de los colaboradores.

Además del liderazgo, Páez subraya la importancia de adoptar una visión amplia de la diversidad

La diversidad debe ir más allá de los aspectos de género, religión o orientación sexual. En 2024, las organizaciones deben reconocer la diversidad de pensamiento, edad, antecedentes culturales y formas de trabajo. Este enfoque inclusivo no solo enriquece los equipos, sino que les permite colaborar de manera más efectiva para alcanzar objetivos comunes

Según la experta, la incorporación de diversas perspectivas dentro de los equipos no solo cumple con un compromiso ético, sino que también se posiciona como un elemento clave para obtener ventajas estratégicas en un entorno empresarial cada vez más demandante. Esta diversidad, en sus múltiples dimensiones, potencia la capacidad de las organizaciones para innovar, adaptarse rápidamente a los cambios y generar soluciones más efectivas ante los retos del mercado.

El avance de la tecnología es otro tema crucial para la gestión del talento en este año. Páez enfatiza que las áreas de recursos humanos deben incorporar soluciones digitales que mejoren tanto la capacitación de los colaboradores como la toma de decisiones. 

La tecnología debe ser parte integral de la estrategia de gestión del talento. No solo se trata de implementar herramientas de formación digital, sino de utilizar la data y la inteligencia artificial para tomar decisiones basadas en información precisa, lo que permitirá una gestión más efectiva y transparente

Además, señala que la tecnología debe facilitar el aprendizaje y, al mismo tiempo, ofrecer a las empresas la capacidad de evaluar el impacto de sus programas de manera objetiva.

Finalmente, Páez aborda la relevancia de la flexibilidad laboral

El trabajo híbrido ya no es una opción, sino una expectativa. Las organizaciones deben ofrecer a sus empleados horarios flexibles y la posibilidad de trabajar desde distintos lugares, ya sea desde casa, desde una ciudad o incluso un país diferente. Este enfoque permite una mejor conciliación entre la vida personal y profesional, lo que, a su vez, incrementa la productividad y el compromiso

Sin embargo, subraya que la flexibilidad no debe confundirse con ausencia de resultados:

Lo que realmente importa son los resultados, no la cantidad de horas trabajadas en una oficina. Las empresas deben centrarse en lo que los colaboradores aportan a nivel de desempeño

Estos cambios deben ser sostenibles a largo plazo, integrándose de manera estructural en la cultura organizacional. "No se trata de seguir modas, sino de construir estrategias que aporten valor a los empleados y a la empresa de forma continua", concluye la directora.

En conclusión, 2024 se perfila como un año crucial para que las organizaciones revalúen y redefinan su estrategia en torno a la experiencia del colaborador. El fomento de un liderazgo empático, la implementación de políticas inclusivas y la promoción de una mayor flexibilidad laboral se consolidan como elementos fundamentales para fortalecer el compromiso de los empleados, estimular la innovación y garantizar la sostenibilidad a largo plazo en un entorno empresarial cada vez más desafiante y competitivo.

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