Colombia se mantiene en la categoría C+ en el índice global de pensiones

En la 16ª edición del Índice Global de Pensiones Mercer CFA Institute (MCGPI), que evalúa 48 sistemas de jubilación a nivel mundial y abarca aproximadamente el 65% de la población global, Colombia ha registrado una ligera mejora en su calificación, aumentando de 61.9 en 2023 a 63 en 2024. Este índice se fundamenta en tres criterios: adecuación, que mide los beneficios y características de los sistemas; sostenibilidad, que analiza la capacidad futura de los mismos para proporcionar beneficios; e integridad, que refleja la confianza de los ciudadanos en su sistema de jubilación. Esta mejora en la calificación se atribuye, en parte, a la reciente aprobación de la Ley 2381 de 2024, la cual establece un sistema de tres pilares destinado a ampliar la cobertura para adultos mayores en situación de pobreza. 

La estructura de los pilares se presenta de la siguiente manera: el Pilar Solidario está destinado a los adultos mayores más vulnerables, proporcionando una renta básica solidaria; el Pilar Semicontributivo se aplica a aquellos que no han alcanzado el número requerido de semanas cotizadas para acceder a una pensión, asegurando una renta vitalicia; y el Pilar Contributivo incluye a todos los afiliados al sistema pensional actual. Este enfoque integral no solo busca mejorar el acceso a pensiones para las poblaciones más vulnerables, sino que también promueve un ahorro sostenible a largo plazo. Dicho lo anterior, es relevante señalar que esta ley entrará en vigor hasta el 1 de julio de 2025.

La reforma pensional en Colombia, a través de la implementación de estos tres pilares, tiene como objetivo unificar los beneficios que anteriormente se otorgaban bajo condiciones y prestaciones desiguales. Este cambio permitirá aumentar la cobertura para la población de adultos mayores en situación de pobreza extrema. Sin embargo, expertos advierten sobre la importancia de abordar aspectos clave relacionados con los criterios de adecuación, sostenibilidad e integridad. Entre estos desafíos, se requiere un enfoque en el crecimiento de los activos mediante el establecimiento de políticas de inversión adecuadas, así como el fomento del ahorro privado para aumentar la inversión de los hogares. Además, es esencial implementar un marco de gobernanza efectivo e independiente que garantice la adecuada gestión de los recursos, crucial para gestionar los ahorros de pensión, especialmente en el pilar contributivo, que recibirá cerca del 90% de las cotizaciones del sistema.

Mercer CFA Institute Global Pension Index (MCGPI) proporciona una evaluación exhaustiva de la efectividad de los sistemas de jubilación y señala áreas clave para su reforma. Este año, el índice incluye un nuevo participante, Vietnam, y abarca aproximadamente el 65% de la población mundial. Coauspiciado por CFA Institute y Mercer, y respaldado por el Monash Centre for Financial Studies (MCFS), el MCGPI enfatiza la necesidad de contar con sistemas de pensiones que aseguren beneficios adecuados y sostenibles.

A pesar de la reciente mejora en la calificación, Colombia enfrenta desafíos significativos que requieren atención inmediata para garantizar la sostenibilidad a largo plazo de su sistema de pensiones. Este contexto resalta la imperiosa necesidad de abordar las deficiencias que han surgido a lo largo de las décadas. Históricamente, el sistema de pensiones colombiano ha sido objeto de un análisis crítico, particularmente tras reformas previas, como la Ley 100 de 1993, que estableció un sistema mixto que combina elementos de pensiones públicas y privadas. Sin embargo, estas transformaciones también han dado lugar a desigualdades, dejando a numerosos jubilados con pensiones insuficientes para satisfacer sus necesidades básicas.

Ante estas circunstancias, es fundamental implementar un marco más sólido que priorice la inclusión de los adultos mayores en situación de vulnerabilidad económica. Un enfoque integral no solo debe priorizar la seguridad económica inmediata, sino que también debe promover la educación financiera y la planificación a largo plazo para los trabajadores activos, aspectos esenciales para construir un futuro más sostenible para el sistema de pensiones en Colombia.

Este cambio es especialmente relevante en un país donde la población de adultos mayores está en crecimiento y la esperanza de vida se ha incrementado. Según proyecciones demográficas, se espera que la proporción de personas mayores de 65 años aumente considerablemente en las próximas décadas, lo que plantea un desafío adicional para el sistema de pensiones.

En este contexto, la Ley 2381 no solo constituye un esfuerzo por reformar el sistema de pensiones, sino que también responde a un requerimiento social más amplio destinado a asegurar que los jubilados gocen de una vida digna y segura. La implementación efectiva de esta reforma exigirá un monitoreo constante y ajustes proactivos en función de las necesidades cambiantes de la población. Esto es fundamental para garantizar que el sistema de pensiones evolucione en concordancia con las realidades económicas y demográficas del país.

Si bien hay avances, es crucial que se aborden las deficiencias existentes para que el sistema sea eficaz y sostenible

^{Mayra Dau, directora de Negocio Riqueza en Mercer.}

La reforma tiene como objetivo mejorar la situación de los jubilados, especialmente en un contexto donde la esperanza de vida aumenta y las tasas de fertilidad disminuyen.

A nivel global, los Países Bajos se posicionan como líderes en el índice de pensiones, con un puntaje total de 84.8, seguidos por Islandia con 83.4 y Dinamarca con 81.6. El sistema de pensiones de los Países Bajos continúa demostrando un impacto positivo, especialmente en el contexto de su transición de una estructura colectiva de beneficios definidos hacia un modelo más individual de contribución definida, respaldado por regulaciones robustas y un sólido apoyo a los participantes.

En comparación con otros países de Latinoamérica, Colombia se encuentra en una posición poco favorable, puesto que Uruguay destaca como uno de los mejores sistemas de pensiones a nivel mundial, ocupando el tercer lugar global con una puntuación de adecuación de 84.0. Chile y Argentina también han registrado mejoras significativas en sus puntajes, alcanzando 70.9 en sostenibilidad y 86.5 en integridad, respectivamente.

Por otro lado, México y Chile han implementado reformas que han fortalecido sus sistemas en los últimos años, lo que subraya la necesidad de que Colombia considere estrategias similares para mejorar su propia estructura de pensiones. Aunque Uruguay y Brasil han mantenido puntuaciones estables en un entorno desafiante, la creciente longevidad, las elevadas tasas de interés y el aumento de los costos de atención han ejercido una presión considerable sobre los presupuestos gubernamentales, lo que ha resultado en puntuaciones ligeramente más bajas en general.

El informe destaca que la transición hacia planes de pensiones de contribución definida plantea desafíos de planificación financiera para los futuros jubilados. Muchos enfrentan la complejidad de tomar decisiones que impactan su situación económica, lo que resalta la importancia de contar con asesoría financiera acreditada. 

La transición a planes de contribución definida también ofrece oportunidades para una mayor flexibilidad y personalización, lo que podría beneficiar a una población laboral que busca reingresar al mercado laboral o transitar hacia una jubilación gradual

^{Margaret Franklin, presidenta y CEO de CFA Institute.}

Con la expectativa de una mayor cobertura y mejoras en los activos, los expertos señalan que es el momento para que los gobiernos y la industria de pensiones colaboren en una reforma que responda a las necesidades cambiantes de la población mayor. Testimonios de jubilados reflejan preocupaciones sobre la sostenibilidad de sus pensiones, evidenciando la necesidad de reformas que vayan más allá de lo superficial.

Aunque el avance en la calificación es un signo positivo, el camino hacia un sistema de pensiones más robusto y equitativo aún está lleno de retos. La comunidad económica y los responsables de políticas deben trabajar juntos para garantizar que todos los ciudadanos tengan un futuro digno y financieramente estable. La reforma del sistema de ingresos por jubilación no solo es un imperativo económico, sino también una cuestión de justicia social en un país donde una parte significativa de la población enfrenta condiciones de vulnerabilidad.

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Mercer CFA Institute Global Pension Index 2024